Son constantes los momentos de la vida diaria en las que los padres y madres tenemos que dar respuesta a  situaciones que se generan con nuestr@s hij@s. En el manejo de los distintos acontecimientos que van surgiendo, en ocasiones, hacemos cosas de las que no somos muy conscientes. El objetivo de este taller es, precisamente, tomar conciencia de nuestra conducta con respecto a nuestr@s hij@s, reflexionando sobre la coherencia entre ésta, nuestras emociones y nuestros pensamientos, valores, criterios…

Al mismo tiempo, los padres y madres adquirirán más competencias y habilidades en el manejo de situaciones concretas (adaptadas a las demandas, necesidades, preocupaciones e intereses del grupo)

La inteligencia emocional es el conjunto de competencias aprendidas que nos permiten: tener mayor conciencia de lo que pensamos y sentimos, gestionar adecuadamente nuestras emociones y relacionarnos con los demás desde la empatía, la escucha activa y la asertividad.

Los padres y madres tenemos un papel fundamental a la hora a ayudar a nuestr@s hij@s a que adquieran estas competencias, la familia es el primer espacio de aprendizaje, donde los niñ@s observan y experimentan las primeras pautas de relación.

A través de este taller, ayudaremos a los padres y madres a adquirir más competencias en inteligencia emocional para que, al mismo tiempo, sepan cómo favorecer la adquisición de las mismas en sus hij@s

¿Has pensado alguna vez en qué medida ha influido en ti la forma en que tus padres se relacionaron contigo desde la primera infancia? ¿Qué habría (o no) pasado con la forma en que te percibes a ti mism@ si lo hubieran hecho de forma diferente?

El estilo de relación con nuestr@s hij@s (la pauta sobre la que se configura el apego) es el pilar fundamental para la construcción de su identidad, una especie de “voz interior” que nos va a acompañar toda nuestra vida y que va a determinar cómo se relacionan consigo mism@s, con l@s demás, con el mundo…

¿Quieres reflexionar sobre alguna de las claves con las que apoyarás la creación de una identidad saludable en tus hij@s?

La realidad de una familia en la que los padres están separados, cada vez es más común. Sin embargo, aún siendo habitual, existen cantidad de matices que diferencian unas situaciones de otras. La separación no deja de ser un proceso de cambio, de crisis, cuya forma de resolución va a afectar a la evolución, más o menos saludable, de los miembros de la familia. En este proceso, la parte más vulnerable, son siempre los niños.

Existen diferentes motivos que nos hacen plantearnos que, tanto en el proceso de separación como cuando ésta está ya consolidada, tiene especial importancia tener espacios de análisis y reflexión que generen guías que nos ayuden (y ayuden a nuestros hijos en su crecimiento):

• EL proceso de separación es un proceso de cambio, de crisis y, como tal, requiere una especial atención para resolverlo con éxito.

• Los padres se encuentran, a su vez, afectados por el mismo, por lo que requieren especial apoyo para cuidarse y cuidar.

• El propio conflicto que genera la separación dificulta la tarea educativa común, necesaria para los niños.

• Puede que no nos resulte fácil acompañar el dolor de nuestros hijos y favorecer su expresión.

• Es habitual que surjan numerosas dudas sobre cómo hacer en el momento de la separación (cuándo, cómo decir…) y posteriormente (acuerdos, dificultades en la comunicación entre los padres, peculiaridades de la relación que pueden preocuparnos…)

Un acompañamiento a los padres, en esta situación, resulta clave para la prevención de diferentes síntomas que pueden aparecer cuando los niños se encuentran en dificultades y sufriendo sin que, en ocasiones, nos demos cuenta.

En ocasiones nos preguntamos acerca de las dificultades en nuestra labor diaria. Con mucha frecuencia, éstas tienen que ver con el funcionamiento del equipo en el que trabajamos. Con un equipo que funciona bien, se multiplican los recursos, se optimiza el trabajo, se genera un espacio de crecimiento continuo. Sin embargo, un equipo poco cohesionado, en el que los problemas y dificultades están por encima, puede ser un importante límite para la actividad educativa. No podemos olvidar que los conflictos en el equipo se trasladan, de una u otra manera, al resto del centro.

Os ofrecemos la oportunidad de revisar, obtener una fotografía del funcionamiento del centro y generar alternativas que mejoren el mismo.

En el día a día surgen numerosas situaciones en el aula/centro a las que es necesario dar respuesta. No siempre es posible tener el tiempo y la calma para reflexionar acerca de ellas. Sin embargo, nuestra forma de actuar constituye una pieza fundamental en el crecimiento y la configuración del autoconcepto y autoestima de nuestros/as alumnos/as, así como en una buena cohesión de grupo y un ambiente que favorezca el aprendizaje.

En sesiones individuales o de grupo, te ofrecemos la posibilidad de que revises tu intervención educativa. De esta manera, incrementarás la conciencia de tus límites, así como de tus potencialidades y habilidades personales que ya posees. Esto te permitirá aumentar el abanico de posibles respuestas, ganar en confianza y mejorar el vínculo con los alumnos/as.

Mediante este curso, l@s profesor@s adquirirán herramientas, estrategias y competencias que les permitan:

- Mejorar su comunicación con el grupo en general y los alumn@s en particular.

- Ampliar su capacidad para generar mayor conciencia en los alumn@s sobre sus propias capacidades y potencialidades

- Favorecer la proactividad, la autonomía y el crecimiento personal de l@s alumn@s

- Promover, apoyar, guiar y facilitar procesos de cambio y gestión de conflictos

El coaching aporta una forma diferente de relación con los alumn@s, enfocada a generar en ell@s actitudes proactivas, de responsabilización personal frente a su vida, detectando sus capacidades y poniéndolas en marcha.

Educadores y docentes conviven en su trabajo diario con diferentes situaciones de conflicto a las que han de dar respuesta. Partimos de la idea de que las discrepancias y el conflicto forman parte de la vida y es importante favorecer su expresión. Por ello, entendemos que optimizar su manejo tendrá consecuencias muy positivas para el vínculo entre los profesores/as y los menores, generando un buen clima de aprendizaje y encuentro que incidirá directamente sobre las habilidades sociales de los niños y niñas, incrementando su autoestima.

Los centros educativos son un escenario ideal para que los niños y niñas incorporen competencias saludables en el ámbito emocional. El grupo brinda un espacio para que descubran, experimenten y resuelvan. Es el banco de pruebas ideal para su socialización. La labor del profesor/a, en muchos casos como mediador/a, va a determinar en gran medida los aprendizajes que de ello puedan incorporar.

Una de las principales dificultades expresadas por los educadores/as y profesores/as de los centros es la de implicar a las familias. Nos encontramos con comunidades educativas que, en lugar de funcionar de forma integrada, se encuentran frente a frente, sin espacios de colaboración. A la vez, entendemos que conseguir este objetivo es fundamental para la evolución de los/as menores con los que trabajamos.

A través de este curso, buscamos abrir la reflexión para identificar cuáles son las principales dificultades en la colaboración con las familias, así como qué recursos y posibilidades tiene vuestro centro. De esta manera, podremos encontrar conjuntamente nuevas vías de colaboración y cooperación.

¿Qué hace que sea importante trabajar la Inteligencia Emocional en el ámbito educativo?. Hemos de tener presente que no se nace con un determinado nivel de Inteligencia Emocional, se trata más bien de capacidades que se van adquiriendo y desarrollando a lo largo de la vida y, este aprendizaje, se inicia desde el momento en que nacemos. Un adulto con elevada Inteligencia Emocional ha tenido, en la inmensa mayoría de los casos, un espacio donde ha podido aprender esto de algún referente significativo. Los centros educativos, entendiendo la educación de forma integral, son, en gran medida, agentes compensadores de las carencias que puedan tener los menores en sus familias. La existencia de referencias positivas en el ámbito escolar es clave para algunos niños/as en su desarrollo social y emocional.

Un niño/a con elevadas competencias emocionales podrá expresar y gestionar eficazmente sus emociones, tendrá mayores y mejores relaciones sociales, sabrá manejarse de forma adecuada en los conflictos y mejorará su rendimiento y capacidades en todos los ámbitos.

Con este curso, dotaremos a los profesores/as de las capacidades básicas para incrementar la inteligencia emocional de sus alumnos/as

Si perteneces a algún centro educativo, podéis solicitarnos un seminario gratuito para vuestros maestros/as y/o profesores/as

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